Esta “Oración de Agradecimiento a Jesús” te dará las palabras para expresar la inmensidad de lo que has recibido. Es ideal para ti que sientes la necesidad profunda de agradecer, no solo por las bendiciones visibles, sino por el fundamento mismo de tu existencia.
Si has estado buscando una manera poderosa y profunda de conectar con Jesús, de reconocer su sacrificio, su compañía diaria y su poder sanador, esta es tu oportunidad.
Esta no es solo una oración; es una declaración de fe y un manifiesto de tres verdades bíblicas que garantizan tu paz, tu fortaleza y tu eternidad. Si tu corazón anhela paz en la tormenta, fortaleza en la debilidad y certeza de la salvación, prepárate para elevar esta súplica.
¡Deja que tu voz y tu corazón se unan para dar gracias al Cordero inmolado!
Te invitamos a dejar de lado el ruido y a sumergirte en este diálogo íntimo. Prepárate para experimentar el poder de la gratitud que transforma tu fe en una roca inamovible.
Ora así:
Amado Jesús, mi Señor y Salvador,
me presento ante ti con un corazón rebosante de gratitud.
Tú eres la fuente inagotable de toda bendición.
Tú eres la roca firme que sostiene mi existencia.
Tú eres la única razón de mi esperanza.
Tú eres mi todo.
Te agradezco por tu presencia constante en mi vida.
Pero hoy mi gratitud se enfoca en tres verdades esenciales.
Estas verdades se han cimentado en mi ser.
1. Gracias por el regalo incomparable del perdón y la vida eterna
Gracias, Jesús, por tu sacrificio supremo en la cruz.
Tu muerte fue un acto de amor y no fue en vano.
Tu muerte me concedió el perdón de mis pecados.
Tú restauraste mi relación con el Padre.
Tú me libraste de toda condenación, tal como enseña Juan 3:16.
¡Tú eres el Cordero perfecto, y por eso, mi Señor, te doy toda la gloria!
2. Gracias por tu Espíritu, mi fortaleza y consuelo diario
Te agradezco, Espíritu de Cristo, porque nunca me dejas solo.
En cada prueba, tu presencia me acompaña, dándome la fuerza para seguir adelante.
Como dice Filipenses 4:13, “todo lo puedo en Cristo que me fortalece”.
Eres mi consuelo inmutable en la tristeza.
Eres mi paz en la tormenta y la capacidad para enfrentar cada nuevo día.
¡Gracias por estar siempre conmigo!
3. Gracias por tu poder sanador
Te doy gracias porque eres mi sanador según lo enseña 1 Pedro 2:24.
Gracias por tocar mi cuerpo y mi mente con tu poder restaurador.
Tú tomaste lo que estaba roto en mí y lo hiciste nuevo.
Gracias, Jesús, porque tu poder corta las maldiciones generacionales de enfermedad.
Gracias, porque tu poder cambia todo diagnóstico maligno contra mí.
Gracias, porque tu poder puede sanar a mis generaciones futuras.
Señor, por favor guíame con tu Santo Espíritu.
Necesito que mi vida sea un eco constante de tu amor.
Úsame como un testimonio vivo de tu poder.
Ayúdame a vivir cada día honrando tu nombre, que es sobre todo nombre.
Declaro que vivo bajo la gracia del Padre, libre de condenación y seguro de la gloria celestial.
Una vez más, ¡gracias, Jesús! Amén.
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¡Qué bueno que has hecho esta oración!
Pero si esta es la primera vez que estás orando a Dios, entonces te invitamos a hacer una oración muy importante que no solo bendecirá tu presente, sino también tu futuro, incluso tu eternidad; haz hoy...
LA ORACIÓN #1
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Gracias Jesus tu eres bueno todo el tiempo
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